1.3 Algunos desafios de las región en cuanto a la producción de las encuestas de hogares

La forma de medición de los indicadores sociales debe estar alineada con el diseño de la encuesta. Los equipos técnicos de los países deben ajustar sus metodologías a los requerimientos de la encuesta para proveer estadísticas oficiales que sean no sólo confiables y precisas sino eficientes en términos de los recursos que se destinan a la recolección de la información primaria, máxime cuando estos muchas veces se deben recortar por limitaciones en el presupuesto de los países.

En Latinoamérica se observa un incremento progresivo de la tasa de ausencia de respuesta debido al aumento de viviendas no entrevistadas que se origina en la expansión urbana y en la desactualización de los marcos de muestreo. La continua expansión urbana en la región hace que los encuestadores afronten retos mayores cuando llegan a un área de muestreo y no encuentran la vivienda que se supone que deberían entrevistar, o en vez de una vivienda ahora encuentran un edificio de apartamentos. Con el uso, cada vez más frecuente de los dispositivos de almacenamiento electrónico, es posible realizar un análisis mejor estructurado de los instrumentos de recolección de información. Por ejemplo, es posible programar saltos más complejos, estimar el tiempo promedio de respuesta en las preguntas del cuestionario, el tiempo promedio de respuesta en los bloques de preguntas, entre otras.

En el seguimiento a las metas de la Agenda 2030 y en la búsqueda del cumplimiento de los ODS, las Naciones Unidas ha expresado la necesidad de contar con estadísticas oficiales, no sólo a nivel nacional, sino a nivel de desagregaciones geográficas o de categorías demográficas de interés (ONU 2017). Es así como se plantea la siguiente necesidad a los países:

La disponibilidad de datos desagregados, oportunos y de alta calidad es vital para la toma de decisiones basada en la evidencia y para garantizar la responsabilidad de la implementación de la Agenda 2030. El seguimiento del progreso en los Objetivos de Desarrollo Sostenible requiere una cantidad sin precedentes de datos y estadísticas en todos los niveles, lo que plantea un desafío importante para los sistemas estadísticos nacionales e internacionales. La comunidad estadística mundial está trabajando para modernizar y fortalecer los sistemas estadísticos para abordar todos los aspectos de la producción y el uso de datos para el desarrollo sostenible.

Por supuesto, la región no es ajena a este reto y debe desde ya plantearse la necesidad de crear capacidad en los equipos técnicos de los INE que deberán utilizar como insumo las encuestas de hogares, los censos de población y los registros administrativos para poder establecer metodologías de estimación en las desagregaciones de interés, que como mínimo deberán clasificarse por sexo, grupos etarios, ingreso, raza, etnia, estado migratorio, discapacidad y localización geográfica (ONU 2016)

Al respecto, uno de los primeros acercamientos al diseño de las encuestas de hogares para la publicación de estadísticas oficiales en dominios pequeños fue presentado por Sinngh, Gambino, y Mantel (1994) en donde se plantean algunas consideraciones para la estimación de indicadores sociales a nivel de dominios pequeños. Sin embargo, más allá de considerar el diseño metodológico, ahora es posible considerar otro tipo de acercamientos inferenciales que pretenden estimar indicadores a nivel de estos dominios pequeños. Rao y Molina (2014) proveen un resumen exhaustivo de las técnicas más usadas en la diseminación de estadísticas oficiales en desagregaciones pequeñas. En América Latina, este tipo de metodologías, que utilizan como insumo principal a las encuestas de hogares, se aplican con mayor frecuencia. Por ejemplo, Arias y Robles (2007) realizan una estimación de la pobreza monetaria en las municipalidades de Bolivia utilizando los datos del censo poblacional del 2001; Araujo (2007) resume la experiencia ecuatoriana de la estimación de la pobreza en los municipios, cantones y provincias; Lopez-Calva, Rodrı́guez-Chamussy, y Székely (2007) presentan la estimación de indicadores de desarrollo humano utilizando estimación de áreas pequeñas en las municipalidades de México a través de la Encuesta Nacional de Ingresos y Gastos de los Hogares. Finalmente, Casas-Cordero Valencia, Encina, y Lahiri (2016) presentan un ejercicio de estimación de la pobreza en Chile utilizando la encuesta Encuesta de Caracterización Socioeconómica Nacional.

Referencias

Araujo, Maria Caridad. 2007. «The 1990 and 2001 Ecuador Poverty Maps». More Than A Prety Picture: Using Poverty Maps to Design Beter Policies and Interventions, Washington DC: The World Bank.
Arias, Omar, y Marcos Robles. 2007. «The Geography of Monetary Poverty in Bolivia». More Than A.
Casas-Cordero Valencia, Carolina, Jenny Encina, y Partha Lahiri. 2016. «Poverty Mapping for the Chilean Comunas». En Analysis of Poverty Data by Small Area Estimation, editado por MonicaEditor Pratesi, 379-404. John Wiley; Sons, Ltd. https://doi.org/10.1002/9781118814963.ch20.
Lopez-Calva, Luis F, Lourdes Rodrı́guez-Chamussy, y Miguel Székely. 2007. «Poverty maps and public policy in Mexico». En More Than A Pretty Picture. Using Poverty Maps to Design Better Policies and Interventions. Washington DC: WorldBank. Citeseer.
———. 2016. «Global Sustainable Development Report 2016». Department of Economic and Social Affairs. https://sustainabledevelopment.un.org/globalsdreport/2016.
———. 2017. «Progress towards the Sustainable Development Goals». Report of the Secretary General. Ecnomic; Social Council.
Rao, J. N. K., y Isabel Molina. 2014. Small-Area Estimation. John Wiley; Sons, Ltd. https://doi.org/10.1002/9781118445112.stat03310.pub2.
Sinngh, M. P., J. G. Gambino, y H. J. Mantel. 1994. «Issues and strategies for small area data». Survey Methodology 20 (1): 3-22.